Posibles reflexiones de Alberto Garzón, ahora que Cayo Lara da un paso atrás y le deja paso en izquierda unida.
Hace ya casi dos años publicaba en este blog las esperanzas que tenía en que Alberto Garzón pudiera ser un Alexis Txipras en versión española, es decir, un político aglutinante de la esperanza de la población en acabar con las políticas que están asolando media europa.
Parece que en Izquierda Unida no entendieron a tiempo que tenían con él una oportunidad de regenerarse, y han dejado pasar el tiempo desde el punto de vista organizativo.
Mientras tanto, la labor de Alberto Garzón en el congreso ha sido inestimable, participando de manera muy activa en los debates, a la vez que informando de los entresijos del poder a los ciudadanos a través de las redes sociales.
Cayo Lara anuncia que no se presentará como candidato a las generales
No quisiera estar en la piel de Alberto Garzón estos días, tras el anuncio de Cayo Lara de que no será candidato para las generales de 2015.
Todas las miradas apuntan a Alberto Garzón, la figura más mediática de Izquierda Unida, limpio de toda sombra de corrupción y que sale sin mancha del escándalo de las tarjetas negras de Caja Madrid/Bankia.
Pero no así su partido, Izquierda Unida, establecida confortablemente como partido minoritario y apesebrado, pero que no ha sabido mantenerse del todo al margen de un sistema tejido y fortificado para conceder privilegios a la clase política.
Izquierda Unida arrastrada por la debacle de los partidos viejos
Moral Santín robó como el que más en Caja Madrid mientras Izquierda Unida miraba para otro lado porque era el conseguidor de créditos para el partido. En efecto, IU fue el partido que más préstamos recibió durante la presidencia de Blesa, y con diferencia, puesto que de los 8,9 millones de euros que la entidad prestó entre 1996 y 2010 a partidos políticos, IU recibió 7,8 millones. Se entiende que Blesa contara con el apoyo incondicional de Moral Santín y de IU.
También hay que decir que Caja Madrid ha condonado deuda a PP y PSOE prestada en los años 80 por valor de 16 millones de euros, y por tanto los préstamos a IU -si son devueltos- no supondrán un quebranto para el contribuyente. La condonación de deuda a los partidos supone una financiación ilegal de los partidos que ha quedado impune hasta la fecha.
Las estructuras de poder de IU en peligro
Alberto Garzón, al estar libre de toda sospecha, representa un peligro evidente para los cargos intermedios que medran en IU, ya que por una parte va a querer introducir primarias a todos los niveles, y por otra parte no dudará en expulsar del partido a todo militante corrupto.
Esto no sería tan fácil de hacer por alguien que estuviera en deuda con todo el escalafón de poder que le habría aupado hasta allí. Por eso los partidos tienden a proteger a todos sus corruptos, ya que si fueran expulsados del partido colaborarían con la justicia. Así se entiende perfectamente el “Luis, nada es fácil, pero hacemos lo que podemos. Ánimo.» o el “Luis. Lo entiendo. Sé fuerte. Mañana te llamare. Un abrazo» en los SMS de Mariano Rajoy a Luis Bárcenas.
La forma de organizarse dentro de los partidos determina la manera de ser de sus dirigentes. Si para llegar a la cima no hay un sistema de primarias, sino un largo camino de compra de apoyos, los dirigentes serán puros trepas de partido, personas especialistas en organizar facciones, en hundir a opositores y en devolver favores.
Esto es paradigmático en los “partidos de la casta”, en donde los dirigentes tienen más de mafiosos que de sabios. Todo político debería tener capacidad intelectual para transmitir ideas y llevarlas a cabo, pero quienes suelen alcanzar el poder tienen grandes carencias ideológicas y se venden a los intereses de quienes les han financiado.
En este contexto Alberto Garzón es un outsider de la jerarquía del partido, que puede dejar a muchos sin su poltrona sin habérselo “currado” durante años como los demás. ¿Se lo van a permitir? Lo previsible será que utilicen su cara bonita con fines electorales –a lo Pedro Sánchez- pero que no le dejen transformar el partido.
Después de ver cómo en las primarias socialistas a secretario general, los afiliados del PSOE votaron disciplinadamente siguiendo las indicaciones de sus líderes regionales y en detrimento de un necesario giro a la izquierda del partido (representado por Pérez Tapias), ya no tengo ninguna confianza en los afiliados de base de los partidos políticos.
Izquierda Unida arrollada por Podemos
Para terminar, aunque Alberto Garzón tomara próximamente las riendas del IU para intentar regenerarlo, el proceso de convergencia con Podemos ya no es posible. Para Podemos, Izquierda Unida es un lastre de la vieja política. Le haría perder más votos de los que le sumaría IU.
Eso explica que la formación de Pablo Iglesias exija para las coaliciones la conformación de listas comunes participando de unas únicas primarias, lo cual supondría la disolución de IU en el tsunami de Podemos. Justo lo que Cayo Lara avisa que no aceptarán.
Por ello es de mutuo interés que IU y Podemos concurran con listas separadas, si bien es de esperar que un hipotético gobierno de Podemos integre a varios representantes de IU, teniendo Alberto Garzón un ministerio de peso (¿economía?).
En cualquier caso, el que fuera hace tan solo un año una joven promesa para hacer crecer a IU por encima del PSOE (el famoso “sorpasso”) es ya incapaz de contener el fenómeno de Podemos que amenaza con volver irrelevante a IU durante unos años. ¿Se sacrificará Alberto Garzón jugando en un partido de segunda teniendo clase sobrada para jugar en primera? ¿No piensa mucha gente que pintaría más en Podemos que en una Izquierda Unida estupefacta que se ha quedado paralizada viendo cómo desaparece el suelo bajo sus pies?
Alberto Garzón es muy jóven, y se puede permitir el lujo de esperar, pero Izquierda Unida está viviendo una crisis que podría terminar con la desmembración del partido (partes se «disolverían» dentro de Podemos) mientras -paradógicamente- ven cómo las políticas que llevan lustros defendiendo las aplican otros.
Desgobierno.es
Gabriel Asuar Coupé
Noviembre 2014