(parodia de «Alien, el 8 pasajero»)
Desde que entramos en el euro, la política monetaria del BCE ha obedecido a los intereses de Alemania. El tipo de interés extremadamente bajo de la última década ha servido para potenciar el desarrollo económico de los países centrales europeos, mientras que en la periferia se ha invertido en exceso en sectores no productivos. Pese al mito de que es la subida de precios y sueldos lo que ha vuelto a España no competitiva (inflación), el responsable principal es el incremento de valor del euro.